Una fianza de $1,500,000 fue impuesta a Jesús Quijano Bonilla, de 30 años, el hombre que alegó se le “zafó” un disparo que terminó con la vida de su hija de nueve años en un apartamento del residencial Las Margaritas.
Esta tarde se radicaron cargos por asesinato en segundo grado y dos artículos de la ley de armas. Fue el juez Rafael Jiménez quien impuso la fianza.
Según el sargento Ruiz, se encuentran en el Cuartel General para el proceso de fichaje e ingresarlo a la cárcel.
Según la información recopilada por la Policía, el hombre, que se había separado de la madre de su hija y ya no residían juntos, entró en la madrugada del viernes al apartamento en el que se encontraba la niña junto a su mamá. Entonces ocurrió el disparo.
El imputado aseguró que se le “zafó” el tiro e incluso a la salida del tribunal cerca del medio día de hoy, insistió en que fue un accidente.
“A mi esposa que me perdone, que la amo un montón”, dijo antes de ser transportado al Cuartel General por agentes del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC). “A mi esposa que me perdone, que la amo”, insistía ante diversas preguntas de la prensa.
“Yo no tenía intenciones de nada, eso fue un accidente”, insistió, mientras que, cuando se preguntó por qué tenía el arma se limitó a responder “estúpido que soy”.
“Yo no disparé, fue sin querer”.
La niña de 9 años, identificada como Ninoshka Nicole Quijano Rodríguez, recibió el impacto de bala en el torso.
Además, el hombre tenía récord criminal por violación de armas y violencia doméstica.
Como publicó este medio anteriormente, la madre de la niña explicó que había hablado por teléfono con su exesposo, quien le había pedido retomar la relación. Por tal razón, dejó la puerta de la casa sin seguro y Quijano Bonilla pudo entrar.
Además la escena fue alterada y la ropita de la niña se ocupó en el “laundry” del apartamento. El revólver fue encontrado en una gaveta donde lo puso otro menor de 16 años y hermano de la niña.