Por Carlos Vallejo (el poeta del
sentimiento).
No era con John Wayne
Eran las diez de la mañana. La más
importante de las cadenas televisivas estatales de Italia, había anunciado una
película de vaqueros del oeste estadounidense para entretener a quienes se
asoman al televisor a esa hora. Pero, apenas salieron al aire las primeras
escenas, las llamadas telefónicas se multiplicaron entre la población. “pon el canal
1, pon el 1”, era la recomendación. Y es que RAI 1 transmitía una película del
oeste, sí, pero pornográfica… mujeres desnudas desfilaban por las pantallas
caseras en recompensa ardiente, cinta catalogada, por error, como filme para
todos los públicos. Tras media hora de transmisión, el propio director de la
cadena, Agostino Saccá, dio la orden de parar. “lo sentimos, ha sido un error
de programación”, fue la única disculpa escrita que apareció en pantalla, antes
de continuar con una comedia musical estadounidense.
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