jueves, 10 de marzo de 2022

La hambruna empuja a los haitianos a emigrar de su país

 Muchos haitianos devuel­tos ayer a su país, de 105 que fueron apresados por miembros del Décimo Ba­tallón del Ejército Do
mi­nicano en Dajabón y por inspectores de Control Mi­gratorio, dijeron que deci­dieron emigrar a territorio dominicano hastiados por el hambre y la desespera­ción.

Algunos expresron que tenían entre dos a tres días que no ingerían alimentos junto a sus familiares, por­que no tienen empleos y recursos para comprar los bienes que necesitan.

Otros, sin embargo, indi­caron que para poder sub­sistir en su país tienen que hacer juntas entre vecinos.

Es decir, consiste en que el primero que logre ven­der algo o encontrar un desyerbo de un patio, so­lar, hacer un mandado, con lo que le dan, tiene que comprar alimentos y compartirlos con los veci­nos asociados y que eso es recíproco entre los grupos.

“Yo, por recomendación de una amiga, visité al dueño de una tienda en Fort Liberté(Haití), él me dio a vender cuatro pa­res de zapatos, cuatro de tenis y seis paquetes de medias, a cambio de un por ciento, pero fue poco lo que vendí, porque hay muchos vendedores en las calles, más que comprado­res”, enfatizó en medio de la tristeza y amargura Joan­fry Marcois, quien esperaba junto a otros de sus compa­triotas ser repatriada a su país, al ser detenida por sol­dados y autoridades migra­torias.

En ese contexto, significó que la gente en Haití está desesperada y que por eso quieren emigrar a Repúbli­ca Dominicana o cualquier otra nación.

Mientras, otros dijeron que intentarán volver para Re­pública Dominicana, por­que en su patria están pa­sando mucha hambre.

“Me agarraron esta vez, pero cuando vuelva espero tener más suerte”, procla­mó Kancon Pierre, otro de los inmigrantes devueltos.

Lugares de detención
De los extranjeros apresa­dos, de acuerdo a las auto­ridades castrenses y migra­torias, 98 son hombres, seis mujeres y un niño.

Estas personas fueron arrestadas en los puntos de controles militares de San­tiago de la Cruz, El Puen­te, Botoncillo, La Solitaria, Laurel, Masacre, Copey, Vi­gía y Don Miguel, cuando caminaban a pie por esos lugares.

La comerciante Catia­na Charles dijo que tenía una microempresa de dul­ces en Lemonade, cerca de Cabo Haitiano, y que junto a su esposo y dos hi­jas, salían a venderlos por las calles, pero que la cri­sis económica de Hai­tí, los llevó a la quiebra.“Otras personas comen­zaron a cocinar dulces y venderlos en las calles, ca­da día más gente en lo mis­mo, llegó un momento que había más vendedo­res que compradores, dejé eso y quise venir a Repúbli­ca Dominicana, me agarra­ron junto a otros”, lamentó. Pero los haitianos se quejan de que viven un vaivén en lo relacio­nado a los alimentos, por­que cuando no apare­cen, pasan calamidades. Aclararon, sin embar­go, que cuando hay sur­tidos en los negocios, entonces no tienen di­nero para comprarlos. Desde el 1 de septiem­bre de 2021 hasta el 3 de marzo de 2022, unos 32,147 haitianos indocu­mentados fueron apre­sados por miembros del Ejército de República Do­minicana cuando cru­zaron la frontera Norte de manera clandestina. Igualmente, 10 cubanos fueron detenidos al entrar al país con pasaportes hai­tianos y visas por un año ex­pedidas por autoridades de la vecina nación

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.